La réplica

Muchas veces he escuchado argumentos

Mira, traes caspa.

como: «no quiero tener hijos porque sólo los traería a sufrir a este mundo». Esa frase o ese tipo de frases tienen por lo regular un trasfondo. Una historia que en la mayor parte de los casos viene desde una infancia con malos padres.

El instinto

¿Han visto esos videos donde los papás parecen tener reflejos ninja donde meten la mano justo a tiempo para que su bebé no se golpeé mientras el responsable hombre está dormido y pareciera que sólo estaba en dinámica vigilia? Sí, yo también. Siempre pensé que eran videos emotivos, emocionantes, increíbles, inspiradores... luego me convertí en padre, y me di cuenta que ahora esos videos me daban miedo y vergüenza.

¿Voy a hablar el idioma de los bebés?

Este es el diccionario "Español - Bebé, Bebé - Español".
Suerte memorizándolo.

Recuerdo hace unos años, no sé, tal vez unos cinco o seis, yo veía bebés y aunque me parecían de lo más agradables, la realidad es que evitaba a toda costa quedarme a solas con ellos; ¿por qué? Porque no sabía cómo hablarles. Sentía que parecía idiota haciendo ruidos raros o peor aun, que en caso de que ese pequeño ser de pronto tuviera miedo, hambre, frío, se hubiera hecho, o simplemente se le diera la gana, comenzaría a llorar, y yo, inexperto por completo, no podría descifrar qué estaba necesitando.

Siempre me puso muy nervioso eso, si sería capaz de hablar el idioma de los bebés, y entender cómo podría ayudarle a estar mejor. Ese miedo se hizo más grande cuando mi -ahora- compadre tuvo su bebé. A veces la llevaba a la oficina, y cuando comenzaba a llorar, inmediatamente él decía "Ah, llora porque tiene hambre" "Está llorando porque se hizo pipí" "Está un poco molesta porque bla bla bla", y yo, con completo desconocimiento sólo atinaba a decir "Ah, pues sí, con razón".

Un día, sentado jugando videojuegos, mientras mi esposa dormía, pensaba, "¿Y si cuando tenga a mi hija no soy capaz de entender por qué llora y yo le quiero dar un biberón cuando en realidad tiene frío?" No sé, esa idea me daba mucho miedo, y aunque no parecía un detalle demasiado importante, pues sabía que de alguna manera no estaría solo y podría preguntar cuando fuera necesario, sí me hacía un poco de ruido en la cabeza.

Hoy, que me hija ya está con nosotros, y que hemos ido aprendiendo juntos, puedo decirles con una sonrisa en el rostro que esto no es misión imposible. Todo lo contrario, todo es muy natural, y así como la naturaleza es sabia para hacer de una mujer todo una madre protectora, también  con nosotros obra maravillas, y nos integra un diccionario español-bebé, bebé-español para poder entender ese idioma tan especial que hablan los bebés.

Si tú, que estás leyendo esto, tienes dudas sobre si serás capaz de entender cuando tu bebé comience a llorar, déjame te digo, no sólo serás capaz, sino que con el paso de los días sabrás exactamente cómo reaccionar. 

Imagina lo siguiente, quedaste de verte con la mejor amiga de tu primo, y sabes que le gustas, pero tú apenas y la has visto una vez en tu vida. ¿Sería lógico preocuparte por cómo tendrás que reaccionar cuando ella se enoje porque no le abriste la puerta del coche después de que fueron a comer en su 3 aniversario? No, ¿verdad? Pues así de ilógico es el preocuparte por adivinar cómo debes reaccionar cuando tu bebé comience a llorar. 

Hay una etapa de reconocimiento, donde tú, con todos tus años de experiencia en esta aventura el vivir, llevas las de ganar, pues pondrás a prueba no sólo tu inteligencia, sino tu pericia como persona. Creeme, vas a aprender, vas a entender, no estés nervioso, mejor disfruta de los gestos, de los pequeños ruidos, de los olores, de todo lo que emane de tu bebé, es algo inolvidable.

Cuando tu bebé llore, sabrás perfectamente que lo primero que necesita es tu paciencia, tu compañía, y, seguramente, algún otro detalle más, como cambiarle el pañal o abrazarle para que el frío baje, pero es lo de menos, tú tranquilo, que aquí tú eres el hombre de la experiencia.

Papa soy

¿Cómo ser un buen padre y no morir en el intento?
¡Descúbralo aquí!

Mientras conducía de vuelta a casa, después de una jornada larga, caminatas, sed, y repegones de desconocidos buscando todo lo necesario para el inminente bautizo de mi hija, me quedé pensando en lo genial que sería el poder compartir esta experiencia con aquellos que como yo, son o están por ser padres primerizos.

Además he ido viendo cosas durante estos primeros meses que nadie te cuenta, y que sería genial que alguien te lo contara, y de ser posible con buen humor mejor.

Es por eso que me decidí a abrir este blog, y es también por esta razón que estoy escribiendo esto, para que aquellos que quieran echarse unas risas con las experiencias que hemos ido teniendo en este camino, aprendan con nosotros.

Desde cositas muy chiquitas hasta las que son plenamente cruciales para asegurar la seguridad de tu bebé, desde "tu bebé usará la ropa de recién nacido durante sólo unos días", hasta "los bebés de menos de un mes NO PUEDEN comer más de un par de onzas, o sea, sí pueden, pues, pero no deben porque el estómago está bien chiquito y en lugar de hacerles un bien.... bueno, ya entendieron la idea, ¿no?"

Por fortuna, tengo suerte, y hemos recibido mucho consejos que nos han hecho la vida más sencilla, pero aun así, esta experiencia es algo que tengo y quiero compartir. Ser padre primerizo es algo que sólo te pasa una vez, y es mejor disfrutarlo a sufrirlo.

Sé que esto no lo leerá casi nadie de momento (si no es nadie), pero eso es lo de menos, de todos modos seguiré escribiendo, y ojalá que en algún punto esto sea de utilidad para ustedes.

Saludos.